La escuela N° 162 de Charra Ruca participó de la Feria Provincial de Ciencias, Arte, Matemática y Tecnología con el proyecto “Un puñado de semillas”, que incentivó a estudiantes de primer ciclo a experimentar desde el cultivo de vegetales hasta la producción de caldos y saborizantes orgánicos para promover una alimentación saludable.
Los expositores de la investigación fueron Ignacio y Francisco, que detallaron todo el proceso de exploración con un cuento como disparador de la reflexión sobre la importancia de las semillas. “Después nosotros salimos a recorrer la huerta municipal, ahí encontramos ají, porotos, choclo, lechuga y tomamos apuntes en nuestras bitácoras”.
El paso siguiente fue el acondicionamiento del invernadero escolar, probando diferentes métodos de plantación. Destacaron que entre las opciones que implementaron “el más eficiente fue uno que usa abono de caballo y de chiva”. En los bancales los alumnos sembraron zanahorias, zapallos, rabanitos, apio, cebollas y morrones, entre otras verduras.
De forma paralela al crecimiento de las plantas, dentro del aula las y los estudiantes aprendieron conceptos vinculados a la alimentación saludable en todas las materias. Desde la expresión artística también profundizaron en el proyecto con la composición de una canción: El que guarda siempre tiene/ un puñado de semillas para la cosecha que viene/ el alimento provee/ la siembra en la tierra, la lluvia en el cielo, semillas de amistad/ son los saberes que quiero.
La elaboración de conservas
Una vez que los vegetales estuvieron maduros, los y las estudiantes aplicaron dos métodos de conservación. Por un lado, construyeron un secador solar natural “que tiene una rejita de plástico para que no se oxiden las plantas y está pintado de negro porque absorbe más el calor. Después de una semana de secado embolsamos todo y le pusimos etiquetas con el día en que se hizo y los ingredientes que tiene”, aclararon.
Por otro lado, cocinaron los caldos concentrados, para lo cual “pelamos vegetales, los higienizamos, picamos y mandamos a la olla con un poquito de aceite, no mucho porque hace mal. Los pusimos en fuego mínimo y dejamos 15 minutos batiendo. Cuando se enfrió todo lo procesamos, lo guardamos en el freezer hasta el otro día y lo cortamos en cubitos”.
Los dos estudiantes explicaron que, antes de la instancia de feria provincial, exhibieron las preparaciones en una feria escolar con los demás grados de la escuela N° 162.