Desde la secretaría de desarrollo territorial y ambiente se pidió a la ciudadanía que extreme los cuidados al encender fuego, porque la sequía persiste y se complica combatir los incendios en bosques nativos e implantados en época de pandemia.
Con el inicio de la temporada estival llega también el periodo de mayor probabilidad de incendios forestales y de pastizales. Ante esa situación, desde el gobierno de la provincia se solicitó a la ciudadanía que evite prender fuego en lugares no permitidos pues las posibilidades de apagarlo se complican por diversos motivos. Entre ellos, la sequía actual y la accesibilidad. Además, este verano, a causa de la pandemia hay que respetar los protocolos vigentes y evitar el traslado del personal de manejo del fuego de un lugar a otro, para sostener las burbujas de intervención ante este tipo de situaciones.
Así lo informó Jorge Lara, secretario de desarrollo territorial y ambiente de la provincia, quien consideró que “este verano la situación es más preocupante”. Explicó al respecto que “hay una escasez de lluvias muy importante. Estamos a la mitad de lo que estuvo el año pasado en caída de agua”. Remarcó que 2019 fue un periodo muy seco, con un promedio de 650 a 700 milímetros de lluvia y, si bien este año hubo nieve, no cayó el agua que se esperaba: “Este año llevamos la mitad de ese registro”, precisó.
Si bien hay pronósticos de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas que dan cuenta de posibles tormentas, aclaró que es probable que traigan aparejadas descargas eléctricas que agravarían el panorama actual. “Hay sequía. Se han corrido o secado vertientes. Este mes hubo varios incendios; todos ellos, producto de la desidia: por fuegos mal apagados. Además, hay una pauta cultural que es ir quemando los pastizales para que vuelvan con más fuerza, cosa que no es así. Al haber mucho viento se hace imposible de contener, `se escapan` como dicen en el campo”.
El secretario Lara detalló que en la última semana hubo un foco muy importante en Trocoman, en la zona conocida como El Valle de las Damas, entre El Huecú y Loncopué. Está circunscripto a un mallín, gracias al trabajo realizado por el helicóptero y los brigadistas que fueron a atacarlo por tierra. Anteayer hubo otro foco en la laguna de Hualcupen, muy cerca del límite con Chile, en plena cordillera. “Estos dos focos se iniciaron por fuegos mal apagados”, aseguró, aunque no se ha podido precisar quién lo hizo.
Lara recalcó la importancia de tomar conciencia. Indicó que “el manejo del fuego se complica porque, con la pandemia, hay otros protocolos a cumplir”. En ese sentido explicó que no se puede mezclar a los brigadistas de una cuadrilla con los de otra. “Por eso –dijo- hemos reforzado. El gobierno ha puesto más plata para hacer picadas, caminos, limpieza de cortafuego, equipamiento”.
Por último, instó a quienes se desplacen por el territorio provincial a apagar muy bien el fuego que enciendan para hacer un asado. “Los relámpagos no se pueden evitar, pero el fuego del asado, sí”, opinó y mencionó a modo de ejemplo que, en los dos últimos meses, un solo incendio se originó a causa de un rayo y los otros 10, por negligencia o imprudencia. Remarcó que cualquier fuego que se encienda debe ser apagado con agua. “Disfrutemos nuestra provincia, pero cuidemos la riqueza de sus paisajes”, concluyó.