La mujer estaba a punto de cruzar la ruta, pero corrió para resguardarse de las rocas. Asistió a la nena más pequeña afectada por el accidente.
“Escuché un crack y se me vino la montaña encima”, dijo la vecina de Chos Malal que estaba a punto de cruzar la ruta 43 cuando se produjo el desmoronamiento del cerro de la Virgen este martes al mediodía. Al notar que las piedras caían a toda velocidad, decidió retroceder y correr con rapidez para alejarse de la zona del desastre, lo que le dio tiempo a salvar su vida y también a asistir a una nena que fue alcanzada por el derrumbe.
“Estaba toda ensangrentada y todo el tiempo pedía por su mamá”, dijo y agregó que pudo contener a la niña con ayuda de un ciclista que también circulaba por la ruta 43. “No me animaba a apretarla mucho porque no sabía dónde estaba lastimada”, dijo la vecina, todavía con la ropa manchada con la sangre de la niña. Aunque aclaró que podía tener un año y medio, desde la Policía informaron que se trataba de una nena de 3 años, que fue atendida en el hospital de Chos Malal.
“Gracias a Dios podemos contarla, creo que tengo un Dios aparte”, dijo la mujer, que se salvó de milagro del derrumbe porque tuvo apenas unos pocos segundos para corregir su camino y evitar los desprendimientos. “Puede volver a pasar porque se sigue desmoronando el cerro”, señaló. Otras cuatro personas que circulaban por el lugar no tuvieron esa suerte: un hombre resultó con una fractura y otras tres mujeres fueron rescatadas. Entre ellas, se cuenta a una mujer embarazada, una adolescente y la nena que contuvo la vecina.
Ángela, la hermana de la mujer afectada, explicó que desde hace treinta años se hablaba sobre la posibilidad de cambiar la traza de la ruta, y los especialistas de la zona se negaban al proyecto por la baja densidad del cerro. Se quejó de que las obras dañaron al cerro de la Virgen por un exceso de dinamita para el movimiento de suelos, pero agregó que no tiene miedo de vivir tan cerca de la montaña, pese a este hecho que sorprendió a todos los habitantes de Chos Malal.