Las infracciones y el incremento de los contagios de COVID-19 hicieron que 2020 terminara con un índice negativo
El saldo en materia de contagios de COVID-19 tras las fiestas de navidad y año nuevo en Chos Malal no fue positivo. Bares que incumplieron con los protocolos acordados, reuniones familiares masivas, infracciones a conductores que manejaban en estado de ebriedad y la desconfianza social en el plan de vacunación fue el reflejo una pandemia que continúa a pesar del cambio de año.
Si bien previo al 24 de diciembre el horario de circulación se había liberado y se tomaron una serie de determinaciones para que la sociedad se sintiera más tranquila; todo ello quedó en la nada tras la fiesta de navidad. La escalada de casos hizo que el Intendente Víctor Hugo Gutiérrez convocara al Comité de Emergencia los que cambiaron las reglas de convivencia para el año nuevo.
Horario de circulación acortado hasta las 03 horas (en consonancia con lo establecido por la provincia), las reuniones familiares que pasaron de un máximo de 40 a 20 personas, y un incremento en los controles de un plan de “Fiestas Seguras”, que vale la pena decirlo no sirvió para nada ni se vio reflejado aquello que se anunció cuando fue presentado en sociedad por la fuerza policial.
En definitiva, más allá del incremento de casos de Coronavirus, la fiesta de año nuevo dejó un saldo de un vehículo secuestrado por alcoholemia positiva, la desarticulación de tres fiestas que no cumplían con la reglamentación emitida por el Municipio y el COE local, las cuales se llevaban a cabo en la calle Lavalle, Chara Los Maitenes y otra en calle La Plata.
Además se registró una persona demorada por infracción a los Artículos 50 y 57 del Código Contravencional de Falta. Y por determinación de la cúpula policial se realizó un control de alcoholemia a todo el personal de la fuerza de servicio a cargo del Jefe de Asuntos Internos, Subcomisario Marcos Alberto Muñíz, con más de 30 pruebas con resultados negativos.